Barbara Izquierdo

La fama no cansa por la fama. La fama cansa por la energía que consume sostener un personaje, un estándar, una identidad y un nivel de entrega,  todos los días , sin descanso emocional. Y esto no solo le pasa a las celebridades tradicionales. También le ocurre a: Líderes de empresa Creadoras de contenido Influencers Expertos visibles Ejecutivos de alto mando Empresarios expuestos ¿Por qué la fama cansa tanto? Porque la fama = energía saliendo. Y casi nunca energía entrando. Ser fuerte. Ser impecable. Ser inspirador. Ser consistente. Ser accesible. Ser ejemplo. La visibilidad exige: La pregunta es:  ¿quién sostiene a quien sostiene a todos? Las causas silenciosas de la fatiga de la fama 1. La sobreexposición emocional:  No es lo mismo ser visto… que ser observado. La audiencia no ve el esfuerzo, solo el resultado. 2. El costo invisible del rendimiento constante:  Tu cuerpo puede sostenerlo por un tiempo. Tu alma no. 3. La presión de no fallar públicamente:...